.PERSPECTIVAS INCIERTAS EN 2023 EN MEDIO DE PRECIOS ALTOS Y OFERTA VARIABLE
La producción mundial de pescado aumentó un 1,2 % en 2022, lo que, combinado con los precios altos de varias especies importantes, dio lugar a un incremento significativo del valor comercial. Si bien el crecimiento de la acuicultura fue inferior a las tasas anteriores, el aumento anual del 2,6 % significa que en 2022 se produjeron 2,4 millones de toneladas adicionales de pescado de cultivo. La producción de la pesca de captura disminuyó levemente a 92,1 millones de toneladas, y la reducción de las capturas de anchoveta peruana tuvo un impacto marcado en la oferta.
A pesar de los modestos incrementos en el volumen del comercio en 2022, la inflación y los precios altos provocaron rápidos aumentos de los ingresos comerciales, que crecieron a USD 193.500 millones, un aumento interanual del 10,7 %. El comercio sigue siendo fuerte, y los cambios en las cadenas de suministro favorecen el comercio internacional a medida que los minoristas y los consumidores buscan combinar productos con el poder adquisitivo variable. Otro impulso para el comercio internacional es que, luego de los precios exorbitantes y los problemas de logística en los últimos años, las tarifas de flete ahora se están acercando a los niveles anteriores a la pandemia de COVID-19 en las principales rutas, aunque algunas siguen siendo significativamente más altas que antes.
Si bien el consumo general se ha recuperado a los niveles anteriores a la pandemia, hay preocupaciones generalizadas en el mercado ante el aumento del costo de vida. Incluso en el caso del pescado relativamente barato, la crisis del costo de vida es tan severa en algunos mercados que productos que antes eran asequibles ahora podrían estar fuera del alcance de los consumidores menos pudientes. Mientras tanto, especialmente en las economías más ricas, los productos pesqueros de mayor precio tienen ventas débiles a medida que los consumidores optan por opciones más baratas. Esto se ha reflejado en una débil demanda de categorías como el cangrejo de las nieves y la langosta. Por el contrario, otros productos en estos mercados están experimentando una demanda firme, especialmente pescados de precio bajo como el pangasius y la tilapia, que están en una buena posición para ampliar su participación en el mercado. Otros productos, como el camarón y el atún fresco, se mantienen estables, pero nuevos aumentos de precios podrían disminuir la demanda.
A medida que nos movemos hacia el 2023, las perspectivas de oferta para la pesca de captura son muy variables y, en general, es probable que se mantengan a la par con los niveles de 2022. Varias especies escasearán por la reducción de las poblaciones y las cuotas que restringen la pesca. La cancelación de la temporada 2022-2023 del cangrejo de las nieves del mar de Bering y el cierre anticipado de la pesquería de cangrejo real rojo en la bahía de Bristol han limitado gravemente la oferta de las dos especies. Las evaluaciones indican una pérdida repentina y extraordinaria de biomasa, que tardaría años en recuperarse. El calamar escasea debido a las pobres capturas en Argentina, mientras que las bajas cuotas de pulpo marroquí han provocado un mercado limitado. El bacalao del Atlántico también se enfrenta a cuotas limitadas, con una captura total permitida de menos de 1 millón de toneladas, la más baja en 26 años.